Los bebedores de tinta
Daniela descubre a un extraño ser en la librería de su padre. Este “tipo raro” va flotando a diez centímetros del suelo, y lo más asombroso es que se bebe las páginas de los libros. La vida de Daniela tras encontrar a Draculeón cambiará: Ella misma –que antes detestaba los libros— no parará de beber la tinta de cuantos caen en sus manos, disfrutando del poder de todas las historias de aventuras.
Frida es una detective sagaz e intrépida, especialista en la resolución de casos artísticos; como el de la inquietante sonrisa fugada de un cuadro de Magritte, o el de las dos traviesas manchas que roban sensaciones y emociones para atesorarlas en los cuadros de Kandinsky.